Anfitriones VIP implicados en estafa de $27 000 en casino de Maryland
Dos empleados del Live Casino & Hotel Maryland enfrentan ahora serios cargos por haber supuestamente ejecutado una estafa de $27,000 contra el casino. Sonejah Richards y Allen Hill no eran crupieres, lo cual hace que este caso sea distinto a la mayoría de fraudes internos.
Ambos trabajaban como anfitriones VIP, una posición usualmente relacionada con la hospitalidad y atención al cliente, no con fraudes de alto nivel.

Tabla de contenido
¿Cómo funcionaba el esquema?
Según los informes, Richards y Hill supuestamente creaban cuentas falsas del programa de recompensas del casino y las cargaban con beneficios (comps). Luego entregaban estas tarjetas fraudulentas a dos jugadores —los mismos cada vez— y repetían el proceso con cada nueva cuenta ficticia que creaban.
En febrero, Richards fue acusada de haber añadido beneficios a 30 tarjetas de recompensas, que luego fueron utilizadas por los jugadores para obtener más de $20,000 en créditos gratuitos para máquinas tragamonedas y otros beneficios ilegales.
En marzo, Hill habría hecho lo mismo, cargando 20 tarjetas con beneficios valorados en $7,300 adicionales.
Aunque se sospecha que los cuatro implicados tenían sus propias motivaciones, la razón exacta aún no se conoce. Los dos jugadores se quedaban con las ganancias del juego gratuito y le devolvían parte a Richards y Hill como agradecimiento por su ayuda.
Consecuencias legales para los empleados
Por el momento, ninguno de los jugadores ha sido acusado oficialmente. Sin embargo, Richards y Hill enfrentan cargos graves, incluyendo delitos mayores y menores relacionados con robo y fraude de identidad.
No es raro que empleados de casinos se vean tentados a robar. Con tanto dinero en circulación, algunas personas ceden ante la oportunidad de quebrantar las reglas. Muchos de estos casos llegan a los medios, pero otros pasan desapercibidos.
Otro caso: Robo de fichas en JACK Cleveland Casino
En marzo, Jason Saliba, crupier de póker en el JACK Cleveland Casino, se declaró culpable de robar fichas del pozo. El incidente salió a la luz en septiembre de 2024 cuando un jugador lo vio metiendo fichas en su bolsillo.
Este tipo de conducta no es común, así que el jugador debió estar bastante seguro antes de reportarlo. Tras revisar las cámaras de seguridad, el casino confirmó la acusación.
La investigación de la Comisión de Control de Casinos de Ohio reveló que Saliba robó fichas en 14 ocasiones durante un solo mes. Aunque el total robado fue menos de $1,000 y ocurrió en partidas de bajo nivel, fue suficiente para que enfrentara cargos menores, no delitos graves.
Cada uno de esos robos fue considerado una infracción de quinto grado según las leyes estatales de juegos de azar. Finalmente, se retiraron los cargos por robo y cinco de las violaciones a las leyes de juego.
Saliba se declaró culpable de nueve cargos menores, no fue condenado a prisión, pero recibió una multa y se le prohibió permanentemente volver a trabajar en el casino.